Dinero El Corazón Del Asunto

Dinero El Corazón Del Asunto

 

¿Qué Es El Dinero?

 

El dinero viene en una gran variedad de formas, pero tiene dos propósitos principales. Primero, es un medio de intercambio de bienes y servicios. Si un granjero tiene una docena de cabeza de ganado en su hacienda y la desea usar para comprar una tractor de un concesionario, el vendedor normalmente no va a tomar el rebaño de ganado del granjero como pago. El granjero tomaría al viejo Bossy y sus compañeros al mercado para venderlos por dinero que podría usar para comprar el vehículo.

 

El otro propósito del dinero es para medir el valor de algo. Una pintura de Leonardo da Vinci es estimada de acuerdo al número de dolares que un comprador está dispuesto a pagar por ella.

 

Las personas a menudo cometen el error de medir su propio valor por la cantidad de dinero que ellos tienen en el banco. Si un hombre tiene $50.000 a su nombre y otro tiene $100.000 escondidos. Es común de las personas pensar que el segundo individuo tiene doble cantidad de razones para estar contento.

 

Una de las ideas falsas más problemáticas que las personas tienen acerca del dinero es la creencia que si sólo tuviésemos suficiente cantidad de el, todos nuestros problemas serían resueltos. Las riquezas pueden terminar con los problemas financieros, pero solo puede proveer distracción de todas nuestras otras dificultades. Alguien una vez dijo, “La vida de una persona es trágica cuando uno tiene en abundancia para vivir pero nada por que vivir.”

 

Errores Eternos Que Las Personas Cometen

 

La decisión más importante que las personas pueden tomar en la vida es aceptar a Jesucristo como su salvador personal. Las personas son lo suficientemente responsables para asegurarse que su seguro de vida está pagado, pero un gran número de ellos fracasan en asegurarse del destino de sus almas eternas. No es sino hasta después de la muerte que los incrédulos se dan cuenta del trágico error que han cometido.

 

“Pues ¿qué provecho obtendrá un hombre si gana el mundo entero, pero pierde su alma? O ¿qué dará un hombre a cambio de su alma?” (Mateo 16:26 LBLA)

 

También los Cristianos están enfrentando una tragedia de gran magnitud. Aunque no se acerca en nada a la tristeza de alguien quien ha perdido la vida eterna, la mayoría de los Cristianos terminarán perdiendo una gran cantidad de recompensas que el Señor promete le dará generosamente a Sus siervos fieles.

 

Después de elegir hacer de Jesús el Señor de sus vidas, demasiados Cristianos se niegan a estar activamente involucrados en su fe. Ellos descuidan en darse cuenta que hay niveles de recompensas en el Cielo que se relacionan directamente con las buenas obras que ellos llevaron a cabo en esta vida. Jesús dijo que la recompensa por el sacrificio y la mayordomía loable sería tan alta como un retorno del ciento por ciento.

 

“Y todo el que haya dejado casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o hijos o tierras por mi nombre, recibirá cien veces más, y heredará la vida eterna.” (Mateo 19:29 LBLA)

 

“Pero aquel en quien se sembró la semilla en tierra buena, éste es el que oye la palabra y la entiende, éste sí da fruto y produce, uno a ciento, otro a sesenta y otro a treinta.” (Mateo 13:23 LBLA)

 

Cuando los creyentes abandonen este domicilio terrenal, ellos instantáneamente pierden la habilidad de hacer cualquier mejora en sus posiciones eternas. Me pregunto si los santos en 1000 años todavía estarán dándose patadas  por no estar más activos en esforzarse por el favor de Dios.

 

Una Recompensa Duradera

 

Los Centros de Control de Enfermedad dicen que la actual expectativa de vida del hombre promedio Americano es de 73 años, 46 años más que al final del siglo pasado. Aún con la mejora en la expectativa de vida, nuestra visita aquí es breve en comparación con la vasta expansión del tiempo.

 

Tengo 36 años de edad, y me doy completa cuenta, si el Señor se demora, que mi visita en este mundo ya va por la mitad. He determinado que a medida que envejezco, mi interés en este mundo se despreciará drásticamente.

 

La Biblia hace numerosas referencias de la brevedad de nuestras vidas terrenales. Somos representados como hierba y flores que hoy somos y que mañana desapareceremos.

 

“Porque: TODA CARNE ES COMO LA HIERBA, Y TODA SU GLORIA COMO LA FLOR DE LA HIERBA. SECASE LA HIERBA, CAESE LA FLOR” (1 Pedro 1:24 LBLA)

 

Porque no tenemos una posición segura duradera en la tierra, es esencial que hagamos planes para la vida venidera. Una persona una vez dijo, “No hay mansiones prefabricadas en el Cielo. Cada vez que hacemos algo que glorifica el nombre de Dios, los ángeles agregan un ladrillo más a nuestro lugar de residencia eterno.”

 

Justo antes que Jesús se apartara de sus discípulos, El les dijo, “Voy a prepararles un lugar para ustedes.” Ha estado trabajando por casi 2000 años, así que para ahora debe ser un sitio completamente espectacular.

 

“No os acumuléis tesoros en la tierra, donde la polilla y la herrumbre destruyen, y donde ladrones penetran y roban; sino acumulaos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni la herrumbre destruyen, y donde ladrones no penetran ni roban; porque donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón.” (Mateo 6:19-21 LBLA)

 

“En la casa de mi Padre hay muchas moradas; si no fuera así, os lo hubiera dicho; porque voy a preparar un lugar para vosotros. Y si me voy y preparo un lugar para vosotros, vendré otra vez y os tomaré conmigo; para que donde yo estoy, allí estéis también vosotros.” (Juan 14:2-3 LBLA)

 

Un Montón de Tacaños

 

Debido a la abundancia de las bendiciones de Dios, si se pregunta, la mayoría de las personas en América serían incapaces de recordarse de un día cuando de verdad no sabían de dónde iba a venir la próxima comida. Nuestra nación vive en una burbuja protectora de prosperidad que nos ha hecho casi insensibles a los dolores de la privación financiera.

 

He investigado un número de reportes sobre donaciones en los E.E.U.U., y llegué con unos números bastante deprimentes. Nosotros los Americanos nos gusta etiquetarnos como muy generosos señalando los $203 billones que dimos en obras de beneficencia durante el último período reportado de 12 meses. Con toda honestidad, un par de cientos de billones de dolares no es mucha cantidad de dinero para un país con una riqueza de $14 trillones. Si no incluimos el dinero donado por corporaciones y fundaciones, el total nacional disminuye a $150 billones.

 

Casi todos los reportes que he examinado encontraron que la persona promedio da cerca del 3% de su ingreso anual a causas de obras de beneficencia. Debido a los factores que implican sus edades, las personas mayores de 65 años dan cinco veces más que cualquier otro grupo. La mayoría de los individuos de mi edad (36) sólo dan el 1% de sus ingresos a obras de beneficencia. Casi una tercera parte de la población nunca da ningún tipo de limosna.

 

Si las personas que están en el grupo de los de bajos ingresos se les puede llamar tacaños, los amigos que están en el grupo de los que hacen más de $100.000 al año harían que Ebenezer Scrooge se parezca a Mr. Rogers. La proporción de la donación anual de las personas que más ganan sólo suma una fracción de un por ciento.

 

Alguna persona que tiene una salario anual de $2 millones puede pensar que es el rey de los filántropos por dar $10.000. Esto sería un trozo fuerte para la cartera de muchos, pero en este caso particular, sólo sumaría a un 0.05 por ciento de sus ingresos.

 

La inhabilidad del dinero en satisfacer es una factor principal en la vacilación de las personas para ser más generosos. Una vez fue conducida una encuesta por la firma de inversiones Wall Street, preguntando cuanto dinero le tomaría a la persona siendo encuestada para alcanzar el sueño Americano. Personas con ingresos familiares menores a $30.000 indicaron que les tomaría $65.000 al año para alcanzar la condición de vida ideal, y los individuos que hacían $100.000 ansiaban un promedio de $192.000 para alcanzar satisfacción.

 

Una de las mejores historias sobre el tema de la generosidad que alguna vez recuerdo haber leído implicó a Alejandro El Grande. Un día, un mendigo estaba al lado de la carretera pidiendo limosna y resultó que Alejandro El Grande estaba pasando. El hombre era pobre y miserable, y no tenía derecho ante al soberano -ningún derecho ni siquiera de levantar una mano solícita. Todavía el Emperador le tiró varias monedas de oro. Un ayudante asombrado por su generosidad comentó, “Señor, las monedas de plata serían adecuadas para cubrir las necesidades del mendigo. ´Por qué darle oro?” Alejandro respondió con una estilo real, “Las monedas de plata cubrirían las necesidades del mendigo, pero las monedas de oro satisfacen las donaciones de Alejandro.”

 

Una fuerte maldición viene con la riqueza. Mientras más dinero tengas, más responsable te haces por hacer buen uso del mismo. Algunas personas son tan ricas que podrían en realidad financiar todo el alcance misionero global de América del Norte. En el Día del Juicio, las personas en esta clasificación estarán en un peligro increíble.

 

“pero el que no la sabía, e hizo cosas que merecían castigo, será azotado poco. A todo el que se le haya dado mucho, mucho se demandará de él; y al que mucho le han confiado, más le exigirán.” (Lucas 12:48 LBLA)

 

Practica Lo Que Predicas

 

Cuando tiene que ver sobre la vigilancia acerca del regreso de Cristo, siempre he aplicado un estándar más alto a las personas en el campo de la profecía. Ellos son los que andan diciendo a las personas que estén listas porque Jesús podría venir en cualquier momento.

 

Cuando por primera vez comencé mi estudio de la profecía, tenía una perspectiva muy ingenua de todos los asociados con la profecía. Sólo asumí que todos ellos eran altamente dedicados a la causa de extender el mensaje del Evangelio. A medida que estaba más expuesto a maestros de la Biblia, aprendí que no todos ellos tenían sus corazones en el lugar correcto.

 

Recuerdo a un caballero que, hace unos pocos años, no continuó con un comentario de noticias en Internet, lo conocí en una reunión pública, y le pregunté la razón por la que había cancelado el programa. El por casualidad me dijo que estaba perdiendo dinero en la aventura, así que decidió no continuar con esa porción de su ministerio.

 

Yo podría entender su decisión si no fuese por dos factores importantes: Primero, era un hombre rico y segundo, su pérdida era extremadamente pequeña. Estimaría su valor neto en más de $10 millones, y su operación sólo estaría perdiendo alrededor de $1.000 mensualmente. SI divides su riqueza sin siquiera considerar el interés compuesto, este hombre podría haber incursionado en más de 800 años antes que se quedara sin efectivo.

 

Ahora cuando lo escucho proclamar con denuedo que él cree que el Señor viene pronto, sus palabras me suenan huecas. Si en verdad pensara que el rapto estaría acercándose, no pienso que se preocuparía en perder unos pocos dolares.

 

Recientemente estaba conversando con otro orador de profecía muy bien conocido que yo sabía era rico siendo propietario una firma de inversiones privada. Le dije con sinceridad que debería colocar más de sus escritos en la Internet para que las personas las puedan encontrar después del rapto. Estoy seguro que tiene docenas de artículos que ha escrito a través de los años los cuales harían de un masivo tesoro escondido en línea. Pero podía decir por su sorprendida reacción que no le gustó la idea en lo absoluto. Pudo más bien decirme, “Lo siento Todd, sólo estoy en el negocio de la profecía por el dinero.”

 

No todos los escritores de los últimos tiempos se enfocan sólo en el punto fundamental. He conocido un número de hombres quienes han demostrado un profundo compromiso para avanzar el mensaje profético. Varios de éstos hombres me han provisto de artículos en varios temas relacionados con la Biblia.

 

Frecuentemente en el Nuevo Testamento, Jesús recitó la frase, “los primeros serán los últimos, y los últimos primeros.” El Señor dijo que si nuestra principal motivación es la búsqueda de ganancias personales o materiales, entonces las ganancias fugaces de esta vida serían nuestras únicas recompensas.

 

“Por eso, cuando des limosna, no toques trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser alabados por los hombres. En verdad os digo que ya han recibido su recompensa.” (Mateo 6:2 LBLA)

 

La Bola Destructiva Del “Evangelio De Prosperidad”

 

 

He sido un crítico del “Evangelio de Prosperidad” por mucho tiempo. Toda la motivación detrás de este clase de donación es la avaricia. La doctrina es parecida a vender billetes de loterías religiosas: Afirma que mientras más dinero dan las personas, más Dios los recompensará con bienes del mundo.

 

El Evangelio de Prosperidad es una simple fórmula que apoya el estilo de vida pródigo de los predicadores que están en el lado receptor de esta transacción de una sola vía. Si el dar fuese el medio para la prosperidad, pensarías que éstos hombre podrían usar sus propios recursos financieros para donar a sus caminos hacia mansiones más grandes.

 

Mucho antes que Oral Roberts hizo su ahora -anuncio infame que Dios lo estaba amenazando de muerte si no levantaba $8 millones, las personas de Word of Faith (Palabras de Fe) ya estaban ocupados envenenando las aguas del dar financiero bíblico. Los ministros enfocados en dinero usan unas tácticas de presión para sustraer un lucro sucio del rebaño. Aquí tenemos unos pocos ejemplos:

 

      En algunas iglesias, se les pide a los miembros pasar al frente con dinero en sus manos.

      Otras iglesias permiten a la congregación saber quienes dan y quienes no.

      En una iglesia, literalmente se paró sobre la mesa de colección durante la ofrenda.

      Otro ministro mantuvo rehén a una iglesia hasta que se dio la cantidad deseada.

 

La gracia de Dios no da lugar para las peticiones agresivas de fondos. Las personas deberían conocer de las necesidades y de las recompensas potenciales que vienen al dar, pero nunca debería haber la indicación que el dar es obligatorio.

 

“Que cada uno dé como propuso en su corazón, no de mala gana ni por obligación, porque Dios ama al dador alegre.” (2 Corintios 9:7 LBLA)

 

Probablemente el mayor rasgo de rebelión de los predicadores de prosperidad en la actualidad es la carencia de sacrificio personal. Muchos de los titulares de la cadena TBN podrían aprender muchísimo de Charles Thomas Studd. El era un famoso jugador Inglés de cricket quien donó su vasta riqueza y se convirtió en un misionero. Su lema era, “Si Jesús es Dios, y murió por mí, entonces no hay sacrificio que pueda ser muy grande para yo hacer por él.”

 

El Reporte Financiero Del Apóstol Pablo

 

Hay mucha confusión de como deberíamos reaccionar a las buenas obras que llevamos a cabo. Algunas personas piensan que si das sabiendo que serás recompensado por tu caridad, has de alguna manera encantado la transacción. La pregunta importante que se necesita hacer es esta: “¿Estamos jugando o invirtiendo nuestro dinero? Si las personas buscan una ganancia en un corto tiempo, están jugando. Si esperan ser recompensados en la próxima vida, entonces probablemente están invirtiendo.

 

El Apóstol Pablo estaba muy consciente de las buenas obras que había acumulado en el nombre de Cristo. Pablo no tenía reservación alguna acerca de su larga lista de aflicciones a los Corintios.

 

“Yo más. En muchos más trabajos, en muchas más cárceles, en azotes un sinnúmero de veces, a menudo en peligros de muerte. Cinco veces he recibido de los judíos treinta y nueve azotes . Tres veces he sido golpeado con varas, una vez fui apedreado, tres veces naufragué, y he pasado una noche y un día en lo profundo. Con frecuencia en viajes, en peligros de ríos, peligros de salteadores, peligros de mis compatriotas, peligros de los gentiles, peligros en la ciudad, peligros en el desierto, peligros en el mar, peligros entre falsos hermanos; en trabajos y fatigas, en muchas noches de desvelo, en hambre y sed, a menudo sin comida, en frío y desnudez.” (2 Corintios 11:23b-27 LBLA)

 

Pablo no estaba tratando de jactarse acerca de sus sufrimientos por la fe. Su motivación era inspirar a quienes él consideraba sus hijos espirituales y probar cuanto se preocupaba por ellos.

 

“No escribo esto para avergonzaros, sino para amonestaros como a hijos míos amados. Porque aunque tengáis innumerables maestros en Cristo, sin embargo no tenéis muchos padres; pues en Cristo Jesús yo os engendré por medio del evangelio.” (1 Corintios 4:14-15 LBLA)

 

El orgullo es muy destructivo al proceso de construcción de las recompensas eternas. Pablo recibió una revelación sobrenatural de la gloria que le esperaba en el Cielo. Para mantener a Pablo de ser sumergido por el orgullo, Dios permitió que Satanás lo golpeara con cierta clase de adversidad.

 

“Y dada la extraordinaria grandeza de las revelaciones, por esta razón, para impedir que me enalteciera, me fue dada una espina en la carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca.” (2 Corintios 12:7 LBLA)

 

Es una buena cosa que el Apóstol Pablo no compartió las misma motivación para la evangelización que está tan difundido en la actualidad. Si su trabajo misionero en Asia Menor fuese evaluada por los estándares de hoy día, sería etiquetado como un fracaso financiero.

 

En un número de ocasiones, el pobre Pablo terminó trabajando como fabricante de tiendas de campaña para mantenerse a sí mismo. La mayoría de las personas a quienes Pablo compartió el mensaje de salvación fracasaron miserablemente en mostrar su apreciación. La carta de Pablo hace muy claro que hubo tiempos donde tenía escasez de sustento.

 

“Hasta el momento presente pasamos hambre y sed, andamos mal vestidos, somos maltratados y no tenemos dónde vivir; nos agotamos trabajando con nuestras propias manos; cuando nos ultrajan, bendecimos; cuando somos perseguidos, lo soportamos; cuando nos difaman, tratamos de reconciliar; hemos llegado a ser, hasta ahora, la escoria del mundo, el desecho de todo.” (1 Corintios 4:11-13 LBLA)

 

No hay duda alguna que el Apóstol Pablo es actualmente uno de los habitantes del Cielo más predominantes. Fue autor de casi la mitad de los 27 libros en el Nuevo Testamento y

soportó interminables dolores de parto por la causa de Cristo. Cualquiera que sufra de ilusiones de grandeza necesita ponderar el registro de fe de Pablo.

 

“He peleado la buena batalla, he terminado la carrera, he guardado la fe. En el futuro me está reservada la corona de justicia que el Señor, el Juez justo, me entregará en aquel día; y no sólo a mí, sino también a todos los que aman su venida.” (2 Timoteo 4:7-8 LBLA)

 

Estilo de Vida Dando

 

Siempre he sido abierto acerca de cuanto me cuesta operar el sitio Rapture Ready. El año pasado, gasté cerca del 12% de mis ingresos para ayudar a avanzar el Reino de Dios.

 

Parecería un inmenso desagüe financiero si tuviera que sentarme y hacer un sólo cheque por tal cantidad a alguna obra de beneficencia digna. He encontrado que la manera más fácil de alcanzar esta medida de donación es hacer de todo el proceso parte de mi estilo de vida.

 

He observado a Rapture Ready crecer de unos cientos de accesos por mes a accesos mensuales que registra los millones. Ser capaz de ver directamente los resultados de mi labor es un factor de motivación inmenso. Cuando doy dinero a una organización grande, no tengo idea a donde va mi donación.

 

Estoy seguro que muchas personas verían mis hábitos de gastos equivalentes a alimentar el dinero a una destructora de hojas. Si estos detractores examinasen sus propios gastos, estarían bastante sorprendidos por algunas de las cantidades de dólares.

 

Las personas que salen a beber varias veces a la semana pueden fácilmente gastar hasta $4.000 al año en actividades relacionadas con el licor. Conozco de una docena de personas quienes derrochan miles de dólares en sus vehículos. Algunos dueños de gatos y perros no tienen ninguna reservación del todo para gastar muchos dólares en los gastos médicos de sus mascotas. Cada invierno, la madre de mi mejor amigo deja caer cerca de $5.000 para sus vacaciones en Hawai.

 

Si estas buscando un ejemplo de devoción financiera extrema, hay algunos drogadictos que gastan el 100% de sus ingresos en su obra de beneficencia favorita. Ellos obtienen comida y alojamiento gratis de los refugios para desamparados, de modo que todo el dinero que levantan pidiendo, robando o trabajando en trabajos pequeños, van para las drogas.

 

Echando Todas Las Bendiciones A Los Cerdos

 

A través de los años, me he dado cuenta que las mismas motivaciones que conducen al mundo de negocios también aparecen en la esfera del Evangelio. Aparte de la gracia de Dios, el dinero es la principal razón por la cual Rapture Ready ha gozado de tan alto nivel de visibilidad. Porque la Internet fue fundada con la idea que la información debería ser en su mayoría gratis, RR ha alcanzado éxito por defecto.

 

Hay una razón especial por la que Rapture Ready es uno de los 10 dominios proféticos superiores. Está en una alta categoría porque hay cerca de 10 sitios bien mantenidos sobre el tema. Estoy seguro que miles de personas están más capacitadas que yo para poder reunir un esfuerzo similar, pero la escasa compensación financiera es un poderoso factor que los está deteniendo.

 

Siempre he estado fascinado con la realidad que la mayoría de los esfuerzos Cristianos son llevados a cabo por un puñado de personas. Si se le ofrece a 100 personas la oportunidad de financiar de alguna manera un alcance, la posibilidad es que sólo 1 persona responderá a la petición.

 

Cuando pesas el bajo nivel de donaciones de parte de los Cristianos con la promesa de Dios de ricamente bendecir a las personas que son generosas, las recompensas potenciales son de una naturaleza exponencial. El Reino de los Cielos es como un multi-multimillonario que decide regalar toda su fortuna a todos los participantes, y sólo unas pocas personas se aparecen para recibir la generosidad.

 

F.E. Marsh ha compilado una lista de algunas de las bendiciones de Dios que le esperan al fiel:

 

Una aprobación que nunca puede ser cuestionada (Efesios 1:6).

Una herencia que nunca se puede perder (1 Pedro 1:3-5).

Una liberación que nunca podrá ser superada (2 Corintios 1:10).

Una gracia que nunca puede ser limitada (2 Corintios 12:9).

Una esperanza que nunca puede ser decepcionada (Hebreos 6:18,19).

Una generosidad que nunca podrá ser quitada (Colosenses 3:21-23).

Un gozo que nunca puede ser disminuido (Juan 15:11).

Una cercanía a Dios que nunca puede ser revocada (Efesios 2:13).

Una paz que nunca puede ser molestada (Juan 14:27).

Una justicia que nunca puede ser deslustrada (2 Corintios 5:21).

 

Pierdes Lo Que Guardas

 

George W. Truett, un pastor muy conocido, fue invitado a cenar en la casa de un hombre muy rico en Texas. Después de la comida, el anfitrión lo condujo a un lugar de donde podían obtener una buena vista del área de los alrededores.

 

Señalando a los pozos de petróleo que interrumpían el paisaje, se jactó, “Hace veinte y cinco años no tenía nada. Ahora, tan lejos como puedas ver, todo es mío.” Mirando en la dirección opuesta sobe la extensión de sus campos de granos, él dijo, “Todo es mío.” Dando la vuelta hacia el Este hacia un rebaño inmenso de ganado, se jactó, “Todo es mío.” Entonces, señalando hacia el Oeste sobre un hermoso bosque, exclamó, “¡Eso, también, es mío!”.

 

Hizo una pausa, esperando que el Dr, Truett lo elogiara sobre su gran éxito. Truett, sin embargo, colocando su mano sobre el hombro del hombre y apuntando hacia el Cielo con la otra, simplemente le dijo, “¿Cuanto tienes en esa dirección?” El hombre bajó su cabeza y confesó, “Nunca he pensado en eso.”

 

Frecuentemente recibo mensajes de correo electrónico de personas que me informan que una vez que el rapto tenga lugar, van a caer en picada como buitres y reclamarán todas las casas y carros de los creyentes desaparecidos. Les digo que estoy de acuerdo con esa idea. Si están dispuestos a perder la gloria del Cielo, ciertamente necesitan alguna consolación por rechazar un premio de mucho más valor.

 

Tengo que preguntarme si la mayoría de los Cristianos piensan que nada se quedará atrás para éstos limpiadores de la tribulación sobre que demandar posesión. He leído los pasajes referentes al rapto muchas veces, y no obtengo ninguna indicación que nuestras posesiones carnales nos seguirán a la gloria. Tal vez aparte de la ropa en nuestras espaldas, la única cosa que probablemente llevaremos con nosotros serán nuestras buenas obras.

 

Algunas personas me han preguntado si conocía de una manera de donar sus bienes a una buena causa después que Jesús los saque fuera de aquí. Estoy seguro que Dios frunce el ceño sobre el valor eterno de las ofrendas dadas después del rapto. El dinero es inútil para nosotros para cuando muramos o seamos arrebatados, de modo que pienso que no debemos tener ningún tipo de expectativa acerca de cualquier gran cantidad de compensación por nuestras donaciones después del arrebatamiento.

 

Después del arrebatamiento de la Iglesia, las riquezas terrenales tendrán un valor grandemente disminuido. Con la repentina ausencia de millones de Cristianos, habrá una superabundancia de casas en el mercado. El número reducido de trabajadores y consumidores enviarán a la economía a entrar en barrena. Sólo tomaría una perdida del 10% de la población para competir con los días más oscuros de la Gran Depresión.

 

A medida que progrese la tribulación, la comida se convertirá en la única señal de riqueza. El libro del Apocalipsis indica que una rebanada de pan será igual a un día de salario.

 

“Y oí como una voz en medio de los cuatro seres vivientes que decía: Un litro de trigo por un denario, y tres litros de cebada por un denario, y no dañes el aceite y el vino.” (Apocalipsis 6:6 LBLA)

 

Dirigiendo A Través Del Ejemplo

 

Cuando tiene que ver con persuadir a las personas en involucrarse más en causas dignas, el liderazgo es la mejor manera de inspirarlos. La Biblia tiene varios ejemplos de los cuales aprender e imitar.

 

Pablo era una gran defensor del lema, “Dirige a través del ejemplo.” Pablo le dijo a Timoteo, un hombre joven en la fe, “... sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, fe y pureza.” (1 Timoteo 4:12 LBLA)

 

En el directorio principal de Rapture Ready, tengo un enlace titulado “Produciendo Fruto.” El propósito de esta página es listar algunos de los logros que hemos llevado a cabo como grupo. Pensé que sería un gran testimonio y una motivación a las personas que lean los ejemplos en esa página.

 

SI deseas establecer tu propio trabajo o ayudar a otro esfuerzo digno, te animo mucho a ocuparte en algo que el Señor Jesús encontraría de su agrado.